Razones psicológicas para gastar más de lo que ganas

Publicado por Maria Lucio en

Razones psicológicas para gastar más de lo que ganas

¿Te has preguntado por qué gastamos más de lo que ganamos? Probablemente conozcas a alguien que le pase o incluso te pase a ti, cualquier persona puede caer en este tipo de comportamientos, por ello, es importante tener consciencia de ellos para evitarlos en la manera posible. Te decimos las principales razones para gastar más de lo que ganas:

Todos alguna vez nos hemos sentido mal o con la autoestima baja, lo creas o no, esto puede afectar directamente a gastar más de lo que podemos en productos o servicios que nos hagan sentir mejor.

 

Muchas personas recurren a realizar compras como una manera de distraerse y evadirse de sus problemas. E incluso para aumentar su autoestima y autopercepción, comprando algo que les haga sentir y percibirse mejor, como por ejemplo, ropa. 

 

Esto lleva a efectuar desembolsos grandes y en algunos casos puede volverse algo compulsivo. Ya que estamos comprando con las emociones y no la cabeza, no estamos siendo 100% conscientes de qué impacto tienen estas compras en nuestra cartera y si no hacemos el ejercicio de volverlo consciente probablemente lo repetiremos.

No importa lo cuidadoso que seas con tu dinero, en ocasiones es imposible resistirse a una compra impulsiva de supergangas o productos indispensables que necesitas ya mismo y que son fuente de satisfacción instantánea y a la vez causa de miles de discusiones en casa.

Lo importante es poner atención a por qué compramos lo que compramos y si se trata de algo pensado y premeditado o de un impulso.

2. Crédito fácil

A veces es fácil pensar que usando la tarjeta de crédito usamos nuestro dinero, ojo aquí, se trata de un crédito y hay que tener disciplina para poder utilizarla de manera correcta.

 

Casi cualquier persona puede obtener crédito fácil, que puede ser una herramienta muy útil, pero como cualquier cosa, también puede jugar en nuestra contra si no le damos un buen uso.

 

El ritmo de vida que llevas hace que te decantes por el uso de tarjetas como medio de pago en tu día a día. 

 

Diferentes estudios han comprobado que se tiende a gastar más utilizando la tarjeta de crédito (al menos un 10% más) porque no las ves como tu dinero, al contrario. En cambio, si pagas en efectivo te obliga a ver cuánto tienes en la cartera. 

Pero, al recurrir a la tarjeta no sucede lo mismo, ya que solo es pasarla y teclear el PIN. Esto facilita que gastes más, dado que el pago se efectúa de una manera menos evidente para tu consciencia.


Por eso endeudarse con una tarjeta de crédito es más fácil de lo que parece y aunque resulte muy cómodo, no es una buena idea financiera.
Si eres una persona que batalla con esto, pregunta a tu entidad financiera posibilidades de bajar el límite de crédito para tener un mayor control sobre tus compras.

3. No tener un presupuesto

Esta es una de las principales razones para gastar más de lo que ganas, ¿alguna vez te has preguntado qué puedes hacer para llegar a fin de mes o en qué se te va el dinero?  

 

Seguro que si estás leyendo esto te ha sucedido o tal vez te encuentres en esta situación en este momento. 

 

Una de las razones por las que gastas más de lo que percibes es porque no llevas a cabo un control de tus ingresos y gastos, además de un presupuesto mensual. Si no sabes para qué quieres que trabaje tu dinero o cuánto deberías gastar, es imposible tener un control de gastos.

 

Por eso aún hoy en día todavía hay muchas personas que no se sientan a realizar un presupuesto, ya que no se han dado cuenta de las consecuencias que provoca no tenerlo y que perturban su situación económica. 

 

Algunas desventajas de no contar con un presupuesto son: 

 

  • Gastar más de lo que cobras. 

  • Comenzar a pedir dinero prestado. 

  • Impagados.

  • Deudas. 

  • Imposibilidad de llegar a fin de mes. 

 

La solución a todo esto es más sencilla de lo que te imaginas: consiste en crear un presupuesto basado en tus ingresos y gastos que te ayude a llevar un control de tus finanzas y sirva como base para que sepas en qué se va tu dinero, reducir o eliminar en la medida de lo posible las deudas contraídas, dar prioridad a ciertos desembolsos u obtener tus metas financieras. 

4. Trabajar en cambiar los hábitos

Los malos hábitos son difíciles de romper, como gastar más de lo que ganas, pero no imposibles. Prepararse para incorporar un nuevo hábito es como prepararse para ir a subir una montaña. Hay que preparar el equipo, pensar el plan, la ruta, el camino y prever todo lo que necesitaremos en el camino.

 

Es importante que sepas que el camino a esa «montaña» no es recto, habrá baches, seguramente te caerás alguna vez, etc. Lo importante es que te mantengas por el camino y vayas a tu ritmo. Nadie empieza siendo perfecto en nada.

 

Para tu camino seguramente sea útil métodos para velar por la salud de tus finanzas personales como: 

 

  • Recurrir a aplicaciones móviles para que tengas a raya el control del gasto. 

  • Generar el hábito de ahorrar. 

Entonces, ¿es posible cambiar las costumbres y comenzar a adentrarse en el mundo del ahorro?

Sí, sin duda. Pero para ello tendrás que dar el primer paso.

5. Otras soluciones

Si quieres que tus finanzas mejoren es imprescindible que controles e incluso disminuyas tus gastos. 

Así que deberías reducir los gastos hormiga para poder ahorra dinero cada mes. 

Pero, ¿cómo evitarlos o eliminarlos? 

Pues trazando un plan para reducirlos en el tiempo:

 

  • Identifica tus gastos hormiga para saber cuáles son y cuándo incurres en ellos.

  • Haz un listado de esos gastos hormiga. 

  • Elabora un presupuesto con los pagos que harás a lo largo del mes.

 

Algunos de los gastos hormiga más comunes son: 

 

  • Suscripciones a plataformas de streaming (Netflix, HBO…).

  • Compras impulsivas o caprichos. 

  • Comisiones bancarias (y no bancarias).

  • Tomar el café fuera cada día.

  • Utilizar el transporte público o el coche en vez de caminar o ir en bici.

  • Productos no previstos en la lista de la compra.

 

¿No sabes que hacer con tus deudas existentes? En este caso un préstamo saludable podría ahorrarte miles de euros en intereses y tiempo en pagar tu deuda. Un préstamo con condiciones claras y que vela por tu salud financiera, ¿le echamos un vistazo?

Categorías: Arbor

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.